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Hola queridos lectores
espero que se encuentren bien
fic ganador y como lo prometi aqui esta un nuevo capitulo
espero que les guste
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CAPITULO 19 LOS SENTIMIENTOS DE ARNOLD II
CAPITULO 19 EL PLAN DE JACOB II
PASADO OBSCURO II
La mente es lo más misterioso y complejo de un ser pensante y viviente ¿Cómo saber que es lo que llego a trastorna a la persona que tienes enfrente? ¿O que trastorno a la persona que le causo el trama a la otra? Es una maldita cadena sin fin.
¿Cómo averiguar lo que una persona realmente está pensando? ¿Cómo saber qué es lo que siente la otra persona en su corazón? ¿Qué fue lo que le molesto de joven? ¿Qué necesita para sanar su alma?
¿O como poder limpiar realmente el alma de una persona cuando el mundo esta tan mal?
¿Cómo lograr ayudar a una persona cuando toda la humanidad ya está manchada?
¿Cómo ir en contra del mundo entero?
A.P.S
Helga miraba a Arnold dormir plácidamente en su cama, había quedado rendido después de que lo usara una vez más para satisfacer sus instintos bajos ¿Y cómo no hacerlo? Ahora si Arnold era totalmente suyo. Para ella totalmente, no tenía que compartirlo con nadie.
Jamás
Él la amaba, lo sabía.
Y lo mas importante lo veía.
Sonrió felizmente mientras le acariciaba el rostro.
-Una foto duraría más –Susurro con voz ronca el rubio
Helga sonrió de lado -¿Hace cuánto estas despierto?
-Poco princesa –Sonrió mientras se incorporaba -¿No deberías dormir?
-Si solo –Le deposito un beso –No quiero pensar que esto es solo un hermoso sueño, quería asegurarme que era real
-Helga es real
La rubia sonrió de lado
-Te amo –Susurro el rubio depositándole un beso casto y puro –No te dejare jamás…jamás amor mío
Helga sonrió mientras dejaba que el rubio la embriagara de amor y de su néctar.
El rubio se subió en ella nuevamente.
-Te amo –Repitió
-Yo también –Dijo la rubia enredándose en las caderas del rubio, Arnold sintió lo excitada que estaba su amada novia.
Rio por dentro ¿Cómo era eso siquiera posible? Hace menos de dos horas habían…pero ¿Qué más daba?
Le gustaba pensar que él era el causante de aquello.
Que solamente él ocupaba su mente, corazón y ahora su cuerpo.
Volvió a besarla con más pasión y deseo, sentía que la cabeza se le quemaba entre la lujuria y el deseo.
Helga lo comenzó a besar del cuello con deseo, mientras sus manos le hacían una exploración completa del cuerpo.
Su pene erecto ya estaba deseoso, por lo que sin pensarlo mucho lo dejo deslizar por la vagina ya lista para él, de la rubia.
Ella gimió pero siguió con su cometido. El vaivén empezó lento para después ir en aumento, estaba loco por esa mujer dios.
Lo malo de lo excitado que estaba era que podía acabar en cualquier momento debía ponerse el condón.
-Helga…
-No te detengas –Exigió la rubia besándolo con más demanda para después colocarse de lado para que él la siguiera penetrando
-Yo…no creo que… -Sintió lo que estaba temiendo así que prefirió seguir dándole placer a su novia y besarla…disfrutar el momento
Termino en ella después de unos 5 minutos más, ella gimió con fuerza cuando eso paso, sus mejillas sonrojadas y lo miraba con una sonrisa traviesa
-Alguien se olvidó de algo ¿No?
Arnold le devolvió la sonrisa -¿Lo hiciste adrede?
Helga se encogió –Lo necesitaba
Arnold rio por lo bajo con nervios y como si Helga leyera su pensamiento agrego –Es seguro ahora
-Bien –Dijo el rubio con más tranquilidad.
-Te amo –Lo beso para después acomodarse en su pecho para dormir.
-Y yo a ti –Dijo suspirando –Te amo tanto que no veo ya la vida sin ti –Dijo el rubio abrazándola con más fuerza
Sentía de pronto una sensación rara en el pecho ante el pensamiento de que se pudiera enterar de la estupidez o de que siquiera ella lo dejara por alguien más ¿Cómo no sentir miedo? Ahora Helga se había vuelto su todo.
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Al día siguiente el rubio se fue en la tarde a su casa, ya que la madre de Helga no tardaría en volver a casa también
Y seguramente Olga también ya volvería de su viaje.
Pero nadie le quitaría lo que había vivido ese fin de semana que sería el mejor de toda su vida.
Sonrió mientras se tiraba en su cama a aspirar el aroma del rubio una vez más.
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A la mañana siguiente la rubia llego muy animada a la escuela su buen humor por supuesto tenia nombre y apellido.
-Vaya Helga buenos días –Dijo la pelirroja con molestia –Se ve que estas de muy buen humor ¿Se puede saber porque? –Pregunto con celos
Helga le sonrió con tranquilidad mientras la abrazaba –Soy muy feliz Lila
-Ya lo note
-¿Y Phoebe?
-No ha llegado
Helga se separó de ella con una sonrisa igual, se le veía feliz, radiante, Lila sintió con dolor que nunca la había visto de ese modo.
-¿Paso?
-¿Cómo?
-¿Lo hicieron?
Helga se sonrojo fuertemente pero antes de que pudiera decir algo o su mano alcanzar a su amiga, alguien le abrazo por la espalda.
-Hola amor buenos días –Arnold le deposito un beso en la coronilla prácticamente para después besar su oreja y su hombro, cuando miro al frente vio a Lila –Oh, perdón Lila, buenos días, no te había visto
Lila lo miro con sorpresa
-No te preocupes Arnold –Dijo en automático
Arnold le sonrió de lado -¿Qué clase tienes primero hoy amor?
-Literatura
-Te tengo una sorpresa
-¿Cuál?
-Ya verás ¿Nos vamos?
-Pero tú no tienes literatura
Arnold sonrió de lado –Te quiero acompañar
-Oh bien –Miro a la pelirroja –Diré a Phoebe que las veré en el almuerzo
-Claro
-Nos vemos luego Lila –Dijo sonriéndole con amabilidad genuina que hacía mucho no había visto en el rubio.
-Adiós –Susurro sorprendida aun
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Helga las miraba con una sonrisa enamorada mientras esperaban en la mesa por Arnold y Gerald que habían ofrecido ir por sus almuerzos.
Este último había estado de acuerdo con su amigo de comer con ellas ese día, dado que no habían quedado en nada con Mike o Jacob, además de que a este último no se le había visto en todo el día.
-No me gusta que Gerald coma con nosotros –Murmuro la pelinegra incomoda
-Vamos amiga solo por hoy ¿Si?
Phoebe suspiro
-Ustedes nunca debieron pelearse
Phoebe se encogió de hombros –Ya no importa
-Hoy vi cambiado a Arnold –Dijo Lila intentando cambiar el tema
Helga sonrió –Si
-Creo que al final solamente estaba molesto por lo de hace tiempo ¿No?
Helga asintió –Pero lo hemos dejado en claro, y sabes Phoebe esta vez ya confía más en mí, me lo ha demostrado
-Más le vale, pero Helga –Lila suspiro antes de decir algo mas -¿No crees que lo hizo para…?
-No –Dijo la rubia –Ni siquiera sabía mis intenciones
-Era obvio que no te diría que no –Añadió la pelinegra
-Por favor…ahora estoy demasiado feliz ¿Por hoy pueden no hablar mal de él?
-Bien –Dijo Phoebe suspirando
Lila la miro un momento –Solo porque tú eres feliz lo intentare, pero sabes que no estoy de acuerdo
-Gracias
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Y así fue pasando el resto de la semana, Phoebe y Lila vieron un cambio radical en Arnold pero ni aun así aceptaban la relación entre ellos, además de que eran demasiado empalagosos desde el lunes y eso comenzaba a molestarles en realidad.
Pero con ello llego el jueves.
Arnold y Helga estaban con el resto abrazados en el jardín mientras "Estudiaban"
-Por favor ¿Pueden parar? –Dijo exasperada la pelirroja
-¿Celosa? –Pregunto el rubio con burla y sarcasmo
-Arnold –Regaño la rubia sonrojada
-Sí y lo sabes
-Lo sé, lo siento –Dijo el rubio mirándola con una sonrisa amable –No debes estar así Lila
Lila suspiro –Solo que es demasiada miel para todos y eso es lo que ya nos molesto
Arnold se sonrojo levemente –En verdad no…no fue intencional
-Lo sabemos Arnold –Dijo Phoebe –Pero ¿Puedes prestarnos un segundo a nuestra amiga?
-Donde pueda darnos su opinión por favor, sin tener problemas para hablar
-Lo siento, ¿Qué necesitan chicas?
-¿Iremos a la fiesta de hoy?
Helga la miro sorprendida
-¿Cuál fiesta?
-Pues la de Rhonda, Helga
-Saben que no me encantan las fiestas de Rhonda
-Bueno pero es que dicen que esta no es como las demás
-¿Qué tiene de especial? –Pregunto el rubio recargándose en el hombro de Helga
-Tendrá un espectáculo exclusivo
-¿De que? ¿Una pasarela de moda? Sabes que es no me gusta –Dijo la rubia sarcástica
-No lo creo, porque dice que será sorpresa
Miro a su novio -¿Iremos?
-No tienes por qué preguntarle a él –Dijo la pelirroja con la mandíbula tensa
-Lila por favor es mi…
-Lo se pero…
-Vamos Lila –Phoebe se levantó –Acompáñame a ir por algo a la cafetería.
-Está tomándolo mal ¿Verdad?
-Es difícil para ella, debemos entenderla –Dijo la rubia triste
Arnold le dio un beso tierno en la mejilla –No te pongas triste
-Es una situación rara para mi y a la vez tan familiar
Arnold sonrió tristemente –Lo se
-No hablemos de eso ¿Qué dices de la fiesta?
-¿Quieres ir?
Helga se encogió de hombros –Solo por ellas no porque yo realmente disfrute de las fiestas de Rhonda
-Entonces será como tú digas amor, iremos
-Gracias amor –Le dio un beso fugaz y tierno –¿Pasas por mí a las 6?
-Por supuesto cariño
Helga sonrió de lado
-Hasta la tarde amor
-Contare los minutos para verte de nuevo mi ángel
-Nos vemos Romeo
Arnold sonrió enamorado y dulcemente hacia la rubia.
Suspiro mientras se levantaba, en ese momento sonó su teléfono celular
"Te lo advertí y lo cumpliré, atente a las consecuencias y disfruta del espectáculo"
Arnold sintió un escalofrió
No sabía el remitente, pero estaba seguro que solo podía ser una persona.
Jacob.
