Capítulo 1

Una chica rubia de 12 años estaba en 6to grado de PS 118, ya no tenía sus dos coletas ahora era suelto lacio con su listón rosa, estaba en el patio caminando de un lado a otro decidiendo si declararse a Arnold ya que él se iba a San Lorenzo con sus padres, esta noticia la ponía muy triste al saber que su amado se iba tan lejos y volvería en 3 años, pero más triste se pondría si no era correspondida a sus sentimientos. Ya estaba mucho tiempo fuera de sus clases, Helga no entraría sin cómo empezar a decirle a Arnold lo cuanto que lo ama. Arnold estaba en el salón muy feliz de que se iría con sus padres, tal y como había soñado, Gerald por un lado esta triste porque no vería a su amigo durante 3 años solo se mantendrían en contacto por cartas. Helga entro al salón sin que se diera cuenta el Sr. Simmons volviéndoles a dar clases en 6to grado. Faltaba poco para que salieran a su recreo, Helga estaba muy nerviosa, no tenía ganas de escribir, no tenía ganas de oír a nadie, en su mente estaba más que las palabras que le diría al cabeza de balón. Arnold solo pensaba en una sola cosa, irse a San Lorenzo con sus padres.

Por fin tocaron la campana para su receso los chicos corrieron para desayunar hoy habría de desayuno albóndigas todos con la emoción iban hacer cola, Helga se quedó sentada en su lugar, vio irse al Sr. Simmons, Arnold estaba solo guardando su libreta, Gerald lo esperaba en la puerta.

-Arnold…-el rubio volteo.-quiero hablar contigo

-de que se trata Helga.-decía un niño de 12 años

La rubia miraba al moreno, este entendió que quería estar sola con el

-hermano sabes te espero en la café no dilates.-dijo Gerald

-está bien Gerald.-dijo viendo irse a su amigo.-y que es lo que me quieres decir Helga

-bueno…este…yo…bueno… es que.-respiro hondo.- Arnold es que, la verdad es que…-decía poniendo sus manos atrás. Arnold solo observaba a la rubia intentando en lo que le iba a decir.

-Helga por que no mejor me lo dices mientras caminamos a la cafetería.-dijo el rubio señalando la salida del salón.

-no… es que esto es privado… te quiero decir que.-la rubia agarra el valor para decir las palabras que tenía pensado decir.- es que me…me…me gustas arnold…ay al fin lo dije.-el rubio abrió los ojos, no se esperaba que Helga se le declarara así.-me gustas mucho Arnold, y no es un me agradas es me gustas es más te amo te amo Arnold, amo tu cabello, tu forma de pensar, tu energía, todo.-decia la rubia

-no…no es otro calor del momento verdad?.-dijo el rubio interrumpiéndola

-qué?.-dijo al rubia alzando una ceja.-calor del momento?... esto te parece calor del momento?.-dijo la rubia agarrando de los brazos de Arnold y dándole un beso en sus labios. Era más que claro que no era calor del momento, se lo decía muy enserio, cuando esa vez que salvaron la ciudad cuando iba a ser destruida ahí fue la primera vez que Helga se declaró pero lo hicieron como calor del momento. Arnold se separó de Helga y la quedo viendo fijamente a los ojos.

-estas hablando enserio?.-dijo Arnold pasmado

-claro que estoy hablando enserio, como crees que estaría jugando con mis sentimientos.-decía la rubia alejándose.-no lo entiendes me gustas mucho, supe que te vas a San Lorenzo, y no quería dejar pasar esto y nunca decírtelo, ahora solo espero tu respuesta.-Arnold la vio se sobaba el cuello

-Helga… la verdad yo…bueno no sé cómo decírtelo, es que solo te veo como una amiga nada más, y no quiero romper esta amistad, me explico.-decía el rubio mirando a Helga. Pero ella sentía que le atravesaba una espada en el corazón al oír que solo la quería como amiga, su mente se quedó en blanco, una lagrima se le salía y deslizaba en su mejilla dado que fue notado por el rubio, se sintió mal por eso. Helga salió corriendo del salón, Arnold quiso detenerla pero no pudo.

La rubia estaba en los baños de niñas, llorando no quería salir de ahí, se decía a si misma que nunca le hubiera dicho, pero ya lo había dicho, ahora solo quedaba hacer una cosa, olvidarse del cabeza de balón, y de lo que haya pasado nunca paso, solo fue una gran ilusión o un sueño y nunca volver hablar sobre Arnold.

13 años después…

Helga ya era una chica madura de 25 años tenía su propia oficina se alejó de sus padres ya que tuvo que trabajar fuera de la ciudad. Tenía su novio chico alto castaño de ojos color miel, tez blanca, llevaban de noviazgo 2 años, la rubia había cambiado demasiado tanto como actitud y físico, era muy hermosa, cuando estaba en la universidad muchos chicos la invitaban a salir pero ella se negaba, solo uno insistía cada día y ese era si novio Robert, en la preparatoria no estudio en la ciudad de Hillwood tuvo que irse fuera por cuestiones de su hermana se mudaba a Inglaterra con su esposo e iban a tener su 2do hijo, la familia pataki se mudó y ahí fue cuando Helga estudio en una preparatoria de niñas la mejor que su hermana le recomendaron a sus papás, a la rubia le daba igual, en la secundaria Helga salía con unos cuantos niños que la invitaban pero no eran muy de su agrado, se había vuelto muy linda. Pero ella no quería una relación con ni uno de los que llegaran a invitarla.

Helga ahora era toda una profesionista prospera y coqueta, en el edificio donde trabajaba muchos empelados babeaban por la rubia cuando pasaba por los pasillos, tenía todo lo que ella pidió, ahora disfruta de su trabajo y la nueva relación que tiene, su mejor amiga Phoebe aún seguía estudiando más bien estaba en su internado de medicina solo le faltaba una semana por terminar y dentro de unos meses se casaría con Gerald, aun no sabían que iglesia y salón. Helga le alegraba que su mejor amiga se casara y aceptar que se casaría con Gerald es la persona con quien se hizo novia desde la preparatoria.

La pandilla se había dividido Lila se fue a España para su próxima película que haría, Rhonda Lloyd se convirtió en una gran modelo muy reconocida en las ciudades, viajaba muy seguido para hacer sus modelajes y comerciales de perfumes. Nadine y Shena terminaron juntas la universidad de veterinaria ahora trabajan en el zoológico cuidando a los animales en peligro de extensión. Los demás chicos Sid, Stinky y Harold trabajaban en un negocio que ellos tenían.

Helga estaba en su oficina sentada leyendo unos oficios y firmándolos, la rubia ama su trabajo, le costaba ver tantos casos de divorcios en una semana a veces los días eran tranquilos.

-Darla te necesito en mi oficina.-decía la rubia en el contestador

-si licenciada.-entro a la oficina viendo a Helga parada y viendo a la ventana.-si licenciada en que puedo ayudarla

-oh si entrégale esto al licenciado Robert por favor.-decía entregándoles los oficios

-si, algo más que necesite

-no, solo eso, gracias.-volvió a mirar la ventana luego se sentó en su silla, revisaba su bandeja de correo electrónico para ver si Phoebe le había mandado un mensaje, pero solo tenían ofertar de un viaje que le estaban ofreciendo. Pasaron las horas, su hora de salida había llegado, Robert tocaba la puerta donde estaba Helga.

-pase!

-hola querida, lista para irnos

-si, solo déjame ver que me hace falta, no sé qué es pero me hace falta algo.-decía la rubia buscando entre papeles

-sabes qué es?.-decía el castaño agarrándole de la mano

-qué?

-esto.-dijo el castaño dándole un tierno beso en los labios siendo correspondido por la rubia.-sabes que no hay nadie mas que solamente nosotros.-dijo agarrándole de la cintura

-no ahora no y menos aquí Robert

-está bien, pero será después

-si después, ahora vámonos

Ambos rubios se fueron, Helga traía su propio auto un malibu color crema, ambos se iban a sus respectivos carros. Helga conducía en la 5ta avenida, tenía demasiada hambre, así que decidió ir a comprar comida rápida. Llego a su departamento muy cansada, se metió a su baño preparo su tina para relajarse un rato, cuando ya estaba en su tina puso una música relajante, cerró los ojos y en un instante quedo dormida.

La rubia estaba en un lugar donde no conocía, miraba a sus amigos de lejos, caminaba para ir con ellos, pero entre más caminaba más se alejaba, no entendía cómo podía pasar eso, el cielo se nublo y empezó a llover, sus amigos desaparecían y ahora estaba en una calle, miro a una niña pequeña bajo la lluvia con la mirada baja y triste.

-esa niña…esa niña.-decía extrañada

Un perro le arrebato su lonchera siguió a la niña, luego un carro le salpico agua sucia la baño de esa agua, corrió donde estaba pero luego se detuvo al v un carro detenerse, unas personas le prestaban el paraguas no podía ver bien que personas eran se tornaba muy borroso, luego sintió que se hundía.

-pero qué?... auxilio ayúdenme!.-gritaba muy asustada.-por favor ayúdenme!.-la rubia no podía salir de ese espeso pavimento que la tragaba. La rubia se despertó de un brinco aún seguía en la bañera, no entendía por qué había soñado eso.

-debo dejar de tomar demasiado café cargado.-miro a su reloj y eran las 8:40 de la noche.-maldición tanto dormir?.-la rubia terminaba de bañarse. Luego de unos minutos la rubia termino de bañarse y fue a ponerse su pijama rosada, se dirigió a su sala y fue a poner una película de comedia "Scary Movie 4", apenas empezaba la película cuando en eso suena su teléfono local.

-bueno?

-hola Helga.-decía una oriental

-Phoebe hola! , Como estas?.-decía muy contenta.-hace tres días que no sé nada de ti que paso?

-lo siento Helga es que estar en el internado te limita el tiempo, ya sabes, esto bien gracias,

-ya me imagino Phoeb´s y como a todo?

-toda va bien, ya en una semana termino mi internado, para luego ver los detalles de la boda

-sí hermana, ya sabes aquí tu dama de honor te apoyara en lo que sea, para eso son no?

-tienes razón, Rhonda me hizo el favor de ver el vestido de novia, ya sabes cómo es Rhonda

-sí la princesa buscando vestido de novia de cada diseñador, aa ya me imagino que tipo de vestido te pondrá jajajajaa

-Helga, deja de imaginarte de los vestidos muy exagerados por favor… le dije que no quería muy esponjoso y ni muy exagerado… solo lo normal y sencillo

-pues espero haga caso, y mientras veré lo del salón, y tienes alguna idea en que lugar?

-no aun no, eso lo platicare junto con Gerald para decidir que lugar,

-bien hermana, tu nos avisas

-si Helga… ah me tengo que ir creo que me llaman, nos vemos Helga cuídate

-si está bien igualmente.

Ambas amigas colgaron.

Ala mañana siguiente Helga conducía su malibu, se dirigía a su trabajo se detuvo cuando vio el semáforo rojo, aprovecho en mandarle un mensaje a su secretaria escribiéndole que comprara un frappe de capuchino, en cuanto el semáforo se puso en verde, la rubia arranco, en 10 minutos la rubia ya estaba ahí. Salió del elevador los empleados la miraban al pasar, vestida de su saco y falda no muy corta solo 2 dedos arriba de la rodilla. Entro a su oficina, la secretaria le llevaba ya su frappe que le habia pedido y se retiro pero antes le dejo un mensaje.

-licenciada la pareja Dawson no podrá venir hoy a su cita con usted.

-está bien llámalos y diles que mañana a las 3 de la tarde estén aquí.-dijo revisando unos oficios

-está bien licenciada, su con permiso.-dijo retirándose

La rubia le daba un sorbo a su frappe .-mmm que rico esta, ahora esto tomare en al s mañanas espero no soñar raro esta vez.-decía cuando su contestador sonó.-si que pasa

-licenciada un familiar viene a verla

-que pase por favor.-dijo la rubia cuando en eso se abre la puerta y escucha una voz de una niña

-tía!.-corría para abrazarla

-hija no corras.-decía una mujer

-tranquila Olga, es mi sobrina favorita.-decía abrazando a la pequeña.- y Melissa?

-con su padre, tenía mucha tarea

-mi mama la castigo por que se escapó de la casa

-eso es cierto Olga?

-Clarissa.-dijo Olga poniendo se las manos en al cintura.-lo siento Helga es que se escapó por ir a una pijamada y estaba castigada por reprobar una materia

-no era necesario castigarla Olga

-créeme que si, se está portando muy rebelde

-ya veo, a sus 12 años y rebelde la pubertad le está llegando a una temprana edad

-lo sé, cambiando de tema como te va con tu novio Robert?

-pues bien, por ahora.

Ambas rubias platicaban de sus vidas cotidianas, mientras tanto en la ciudad de Hillwood Gerald estaba en su oficina cuando su asistente le dijo que tenía una visita.

-dile que pase por favor.-dijo el moreno arreglando su saco cuando se escucho abrir la puerta.-hermano! Que hay!.-dijo haciendo el saludo que comúnmente hacían

-hola Gerald como has estado.-dijo el rubio de ojos verdes

-bien, y dime tu, no supe nada de ti después de la universidad, como has estado, donde trabajas ahora siento un arquitecto

-jajaja bien bien, estoy trabajando en nueva york, en una empresa ya sabes me la paso haciendo planos para nuevos edificios o remodelarlos

-vaya hermano interesante a ver cuándo paso a verte, y dime y ese milagro que vienes a hillwood

-pues vine a visitar a mis padres y también a dejarles flores a mis abuelos.-dijo bajando al cabeza

-ya veo, lo siento mucho por tus abuelos, me entere por Phoebe

-si no te preocupes, ahora estamos saliendo adelante, mi abuelo le dejo de herencia la casa de huéspedes a mi papá, ahora ellos se están quedando a vivir ahí, y lo inquilinos pues unos son nuevos, el señor cocoshca pues se divorció de su esposa, Ernie se casó se mudó, y Mr Hyunh sigue viviendo en la casa de huéspedes junto con su hija, por ahora solo dos inquilinos son nuevos, no los eh conocido bien pero los eh visto pasar.

-ah ya veo, y bueno que dicen las chicas ya tienes novia?, dime no supe nada

-jajajaa claro Gerald tengo novia, se llama Katy

-wao y como la conociste fue durante el trabajo o como

-acertaste, si en el trabajo apenas la estaba conociendo cuando me asignaron un ayudante, y fui conociéndola poco a poco, llevo 1 con mi relación

-vaya hermano no perdiste el tiempo ee viejo.-dijo con la mirada picara

-Gerald.-decia el rubio mirándolo serio.-y dime tu ya te vas a casar no?

-si asi es viejo, ya me casare con mi querida Phoebe.-decía acomodándose en su silla giratoria

-vaya, es increíble que te cases, y yo aun sigo en una relación

-si viejo, oye recuerdas esa vez que Rhonda jugaba con su adivinador de bodas de origami?

-si lo recuerdo

-pues es extraño pero yo le dije que hiciera el juego de su adivinador y casualmente salió Phoebe, pero después dijo que descubrió una falla en su adivinador de origami y la verdad no me sorprendió mucho, sabía que algún día estaría con Phoebe.

-no me habías contado eso, dijiste que era una bobería todo eso

-si lo se, pero la curiosidad me mataba, pero ahora mírame me voy a casar.-dijo abriendo los brazos.- y recuerdas que tuviste un sueño muy feo que te casarías con Helga G. Pataki?.-decia el moreno, Arnold levanto la mirada al escuchar ese nombre.

-bueno fue solo un sueño.

-sí lo sé, oye que raro estas trabajando en nueva york verdad?

-sí, por qué?

-porque… bueno no lo sé, Phoebe me dijo hace días que su dama de honor es Helga Pataki y me comento que está en nueva york, es raro que no la hayas topado

-qué?.-dijo el rubio sorprendido.-bueno es una ciudad muy grande

-eso si hermano, bueno en fin un día de estos iré a visitarte en nueva york.-decía el moreno

Ambos amigos seguían platicando, hasta que llegó el momento que Arnold se retirara, se fue a su auto, cuando manejaba recordó lo que le dijo su mejor amigo, Helga estaba en nueva york trabajando, él no sabía nada de ella después de irse a San Lorenzo, cuando regreso para iniciar la preparatoria en hillwood ella ya no estaba, Phoebe había comentado que se fue a vivir a Inglaterra con su hermana y sus padres, y durante la universidad no hubo ocasión alguna en reencontrarse no se habían visto nunca desde hace 13 años, su mente daba vueltas a tantos recuerdos, se preguntaba a si mismo ¿Dónde está ella?, ¿estará bien? , tenía una sensación de verla, pero como la vería ella a el después de 13 años. La única ocasión de verla es en la boda de su mejor amigo.

Continuara…